Hi there! I am Miguel Martín Vázquez. I was born and raised in Valencia (Spain). BA in Audiovisual Communication and exchange student in Malmö University (Sweden). When I was little I loved filming with a videocamera. So when I finished elementary school, following my vocation, I signed for grades in Image and Sound.
I started working as cameraman in a local TV station while college. Newly graduated I joined a team to start the first TV show in the newly created public TV of the Balearic Islands. Then I became technician in TV series in Valencia, Alicante and Madrid.
I started filming weddings in 2005, first for other studios like Fotostar. Later with Gemma Gil as Tilaq. And since 2021 as an independent videographer. I love weddings and sharing with my clients their happiest momments.
I count on a small team of freelancers in which I trust to cover two weddings per date max. Edition is alway made by myself, which I think is key. I will dedicate to your video not only a week but whatever necesary to make it perfect, with good care in details and best final touch of image and sound.
Hola, soy Miguel Martín Vázquez. Nací y crecí en Valencia. Estudié comunicación audiovisual en la Universidad Cardenal Herrera CEU y erasmus en Malmö (Suecia). De pequeño me encantaba grabar con videocámara. Así que por vocación en cuanto acabé el colegio me apunté a FP de imagen y sonido.
Empecé a trabajar desde segundo de carrera en televisión local. Recién licenciado arranqué la televisión autonómica de Baleares y fui técnico en series de ficción en Valencia, Alicante y Madrid.
Comencé a filmar bodas en 2005, primero para otros estudios como Fotostar. Después junto a Gemma Gil como Tilaq Estudio. Y desde 2021 como videógrafo en solitario. Adoro las bodas y acompañar a mis clientes y sus seres queridos en momentos tan felices.
Cuento con un reducido equipo de profesionales, también autónomos, en quien confío para poder cubrir como máximo dos bodas por fecha. La edición corre por mi cuenta y esa es la clave. Le dedicaré a vuestro vídeo no una semana, sino el tiempo que sea necesario para que sea perfecto, con cuidado y cariño por los detalles y la calidad de imagen y sonido.